El otoño es tiempo de calabazas y en casa nos encantan. Conozco a bastante gente que cultiva calabazas y que no sabe que hacer con tantas en esta época y siempre terminamos con la nevera llena de calabazas gigantescas durante esta época por lo que buscamos distintas maneras de aprovecharlas.
Hace un año probé este plato en un restaurante persa que me enamoró y pasé tiempo buscando la receta para prepararla en casa. Encontré varias versiones y terminé adaptándolas a nuestros gustos. El resultado es un postre sencillo, rico y con un regusto oriental que lo hace distinto a lo que estamos acostumbrados y que a mi hija le encanta. Una buena forma de aprovechar parte de las calabazas que tenemos en la nevera.